La piel grasa se caracteriza por poseer una emulsión epicutánea de agua/aceite donde las glándulas sebáceas muestran una exagerada actividad. Esta secreción se inicia durante la pubertad y el lugar donde las glándulas sebáceas son más numerosas y voluminosas.
Los factores determinantes de este tipo de pieles son muchos, entre otros:
- hereditarios
- aplicación de productos con alcohol, dañinas para el cutis ya que aunque, aparentemente eliminan la capa grasa, en realidad excitan aun más las glándulas sebáceas
- aplicación de productos con derivados del petrolio( cosméticos populares)
- una dieta rica en sustancias lipídicas
- el estrés
- la fatiga
- cambios hormonales
Efectos de tratamiento:
- hidrata
- regula la secreción de las glándulas sebáceas
- oxigena
- evita la pérdida de agua transepidérmica
- remineraliza
- efecto anti-radicales libres
- minimaliza visiblemente los poros dilatados
- la piel tiene un aspecto más fresco y limpio